Así es como una niña de 8 años ayuda a su compañera de 6 a aprender a escribir en Ludoteca: como a la más peque le cuestan aún las minúsculas, su compañera le escribía las palabras para que viera como se hacía, y la peque las repetía. Y así, palabra por palabra.
Y de esta manera, ellas solitas, ¡se escribieron un libro enteretito!
(Y nosotros con la boca abierta... )
❤
No cabe duda que de esta historia podemos sacar muchas reflexiones. Pero me parece tan, tan hermosa que las reflexiones las dejaré para otro post....♥♥♥
que chulo Marta!!! que pena que lo haya perdido ¡me encanta! jaja :):)
ResponderEliminarSi, Virgi!! pero no te preocupes, sabes que siempre hay cosas bonitas en la Ludo. un sábado te tienes que venir :)
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